Ahora que tan de moda está el DIY (Véase Do it Yourself, o el Hazlo tú mismo de toda la vida, vaya), dejadme que os enseñe la cocinita que se ha currado mi padre para mis hijos.
Siempre ha sido muy manitas, tanto que en casa le llamamos McGiver porque con cuatro clavos te arregla lo que sea. Hasta mis hijos, cuando se estropea o se rompe algo, siempre dicen que no pasa nada, que ya lo arreglará el yayo. Pero lo de la cocinita... ¡nos ha dejado boquiabiertos a todos!
La inspiración le vino del catálogo de Navidad de Imaginarium, en la que hay cocinitas de madera preciosas. Mi padre puso la técnica, pero mi madre colaboró en el diseño y en esas cortinitas Vichy que tan monas han quedado. Los tableros y los pomitos rosas los compraron en Leroy Merlin y para que quedara más auténtica compraron un hornillo con sus cacharritos (y hasta la bayeta!) y un lavavajillas eléctrico de Coloma, y un grifo ¡que tira agua de verdad!. Esta marca es, por cierto, valenciana con sede en Ibi (Alicante) y tiene un outlet online con precios muy interesantes que además destina parte de las ventas a una ONG.
Mi padre no había tomado medidas, pero la cocinita ha encajado perfectamente de casualidad en un ladito de nuestra cocina, así que los tenemos entretenidos mientras cocinamos nosotros. De momento juegan un montón los tres y espero que les dure la ilusión, para lo que iremos incorporando nuevo menaje. Y a ver si la pueden disfrutar nuestros nietos ;-).
PD: Para el que no tenga padre manitas, sabed que Imaginarium hace un 5% de descuento a las familias numerosas.
